Leandro Maldonado: el noveno en abandonar la casa Quién debe abandonar la casa es... Leandro.

El 67.9 por ciento de los votos fueron dirigidos hacia Leandro Maldonado expulsándolo de la casa. De esta manera, Mariela sigue en el juego.
En cuanto a los resultados del blog, una vez más nuestros números se asemejaron a los oficiales.

La estadía de Leandro duró 62 días. Debutó en los teléfonos junto a Silvina y Juan, luego formó parte del sexteto que se cobró a Agustín como víctima, posteriormente fue beneficiado al quedar nominado con Nadia y finalmente le tocó quedar en los teléfonos junto a Mariela, la salteña aliada a Marianela.
Una vez que Jorge Rial anunció el resultado, Leandro saludó rápidamente a todos sus compañeros, agarró su valija, les dio aliento, fomentó la unión en el grupo y luego salió de la casa.
Los más afectados fueron Juan y Mariela ya que con ellos había generado lazos muy fuertes. Con Sebastián, las cosas no estaban tan bien, pero había cierto cariño entre ellos.
Apenas salió Leandro de la casa, la tribuna lo recibió muy excitada. Indignados por la eliminación de su favorito comenzaron los cánticos de repudio al bando opuesto. "Ole le, ola la, Seba se la come, Lean se la da". A esto se sumaron insultos como "Seba puto", "Jonathan morite", y "Muerte a los pollitos". A pesar de que los chicos entendieron monstruitos, en vez de pollitos... los demás insultos llegaron intactos y afectaron la sensibilidad de Sebastián quién se fue al cuarto a llorar desconsoladamente. Tratando de tapar el descuido de Gran Hermano, quisieron mostrar que el llanto de Sebastián era por la salida de su amigovio, Lean.
Una vez en el piso, Leandro se reencontró con su familia, amigos y los ex participantes quienes lo recibieron satisfactoriamente.
Cuando volvieron a ingresar a la casa, Sebastián no pudo unirse al grupo. Sus compañeros lo excusaron diciendo que se sentía mal para no tener que comentar los insultos homofóbicos de los que fue victima.
A pesar de ello, Leandro quería despedirse de él y no pudo. A los demás los saludó, a algunos más y a otros menos, pero se fue con buena onda con todos.
En la entrevista a solas con Jorge, le preguntó si era gay, si era bi y si era virgen. A todo respondió que no, que solo jugaba con eso por ¿diversión?, ¿aburrimiento?...
Mañana responderá a todas las preguntas en El Debate.

"Mariela me gustó como persona"
El último eliminado de la casa de "Gran hermano 2007" charló en exclusiva con Primiciasya.com

¿Cómo fue ese primer momento cuando viste a la gente alentándote en la tribuna?

Fue increíble porque ver toda la gente ahí y que te reciba de esa manera, a mí me gustó mucho. Me sentí muy cómodo y la verdad que estoy contento.
¿Y la repercusión al otro día en la calle?
La verdad que re bien porque no recibo así críticas y esas cosas. Siempre son elogios: "Tendrías que haberte quedado", "Tendrías que haber ganado", bueno cosas así imposibles, pero estoy muy contento por eso. Me recibió muy bien la gente.
¿Te llevaste a amigos dentro de la casa?
Sí, sin dudas. Todos nos llevamos amigos y creo que los enemigos es mejor dejarlos ahí.
¿Quiénes son esos amigos?
Juan, Agustín, Diego, quizás, también. Entonces es como que me llevo muy bien con ellos. Enemigos ninguno porque es una palabra bastante fuerte y fea por lo que vivimos ahí en la casa que no es tan poco como para decretar quien es amigo y quien no.
Primero fuiste por Marianela y después te quedaste con Mariela, ¿Cómo fue el tema del amor dentro de la casa?
No, lo que pasa es que Marianela me atrajo al principio físicamente y después me di cuenta de que su forma de ser no congeniaba con la mía, y aparte después de todo el rechazo que ella hizo hacia mí, eso me puso mal. Ahí me di cuenta de que éramos distintos y que no se iba a dar nada. Después pasó una o dos semanas y me interesé en Mariela, que quizás no me guste tanto físicamente como Marianela, sin embargo a mí me gustó más lo que era como persona. Así que eso fue lo que más me cautivo de ella y hizo que me decida por eso.
Fuera de la casa, ¿puede seguir la relación con Mariela?
Puede ser. He visto videos tape que por ahí eran bastantes fuertes pero que sé yo...
¿Y qué pensás de eso?

Y no, no sé, cada uno lo ve como quiere. En el momento no sabes que creer pero son cosas que después lo hablaré con Mariela afuera y después se verá...

Leandro, el último expulsado de la casa de Gran Hermano, dice arrepentirse del juego de seducción que inició con el chico gay de la casa. Además habló del futuro de su historia con Mariela y de los compañeros que extraña tras su salida.

El noveno expulsado de la casa de Gran Hermano dio la cara y habló de todos los temas que marcaron su paso por el reality que conmociona a la TV argentina.

El chico de Loma Hermosa, más relajado luego de vivir 62 días de encierro, no eludió ningún tópico y reveló su posición respecto a su ambiguo juego de seducción.

"Entré por la experiencia de vida, como quien juega a la escondidas simplemente por jugar. Gané demasiado y me voy conforme con mi participación. Salí en el momento justo", señaló acerca de sus objetivos dentro del juego.

Siempre cuidado en su aspecto exterior, apareció con su tradicional look de cabellos revueltos y su especial lenguaje parsimonioso y aniñado que resalta su perfil adolescente, tan criticado.

"La plata realmente no me interesa y como ya dije varias veces dentro de la casa, si hubiera ganado la hubiera invertido en un comedor comunitario para dar de comer a las personas que lo necesitan. Será para más adelante", acotó.

Ante la consulta sobre su relación con Mariela, con quien inició un pequeño romance, el chico se mostró bastante más frío que en los tiempos de su estadía en la casa.

"Tendría que empezar todo de cero como para tratar de seguir y ver si es sincero lo que ella siente por mí. Estoy muy tranquilo y no quiero complicarme la vida. Vengo juntando pedacitos de corazones de todo lo que viví en la previa de la casa", dijo Leandro apelando a la cautela.

Más adelante señaló: "Si bien es muy linda físicamente, no es mi tipo de mujer. Quizá lo que me gustó de ella es su actitud, su forma de ser".

Sus conflictos en la casa también fueron temas de conversación y así se expresó Leandro: "Lo de Marianela fue atracción física, después cuando llegamos a la discusión traté de arreglar las cosas para recuperarla como integrante del juego. No quería estar mal con nadie, incluso lo intenté luego con Jonathan".

El tema candente de la semana fue su verdadera sexualidad y el coqueteo no consumado con el chico asumido gay dentro del reality. Al respecto dio su versión de lo sucedido: "Hubo un cierto juego que iniciamos con Sebastián pero antes de empezar primero lo aclaré con él para saber si no le molestaba. No soy gay pero conozco muchos amigos homosexuales y tengo ese tipo de trato con ellos. En la casa fui tal cual como soy afuera".

También hubo tiempo para hacer una revisión de su conducta en el juego: "Tendría que haberme fijado en mis actitudes con Sebastián. Debí haber aclarado más cosas con él. Quizá lo lastimé sin querer, pero del resto de mi participación no me arrepiento de nada".

Además reveló el cariño que le tiene al cordobés con quien pasó largas horas de charlas: "Extraño mucho a Juan, él es como mi hermano. Es un hermano de la vida, un muy buen tipo, muy sincero. No es un jugador, tiene muchas virtudes como persona y una luz especial".

"Estuvo bueno salir, creo que "Maru" merecía quedarse en la casa. Quizá ella jugó un poquito con lo que a mí me pasaba, por lo que veo, quizá no.. pero creo que yo ya no necesitaba seguir en el juego, concluyó.
Hacé click en cada uno de los videos y mirá el reportaje completo a Leandro Maldonado.

“Mi mamá siempre me dice: vos tendrías que haber sido mujer”

Su sexualidad es tema nacional. Pero lejos de inhibirse, el noveno eliminado de GH sorprende con una producción provocativa. Y confiesa que su juego comenzó durante el casting, cuando anunció que “estaría con un hombre con tal de llegar a la final”.

Leandro no empezó a jugar dentro de la casa de Gran Hermano. Su juego comenzó afuera, un mes antes de quedar seleccionado entre los 18 participantes de los que hoy habla todo el país. Más precisamente, la tarde en que salió de su humilde casa de Loma Hermosa (donde vive con sus padres, su abuelo y sus cinco hermanos) para presentarse al primer casting del reality show más famoso. Una vez allí, y tras algunas consultas de rigor, un productor le preguntó:

–¿Estarías con un chico dentro de la casa?
–Sí.
–¿Lo besarías?
–No sé… Habría que ver… Si sirve para llegar a la final, lo haría.
Llámelo estrategia o como quiera. Lo cierto es que Leandro siempre tuvo bien claro a lo que se exponía, y los riesgos que corría. O no.
–¿Eras capaz de llegar a besar a un hombre?
–No, yo sabía que no podía llegar hasta ese límite, pero pensé que jugar con esa duda me podía ayudar a pasar el primer casting, que siempre es el más difícil. Y se ve que me vieron cara de gay o una inclinación homosexual…
–¿En la vida cotidiana te pasa que duden de tu sexualidad?
–Sí, muchas veces me preguntaron si era gay. Pero nunca me molestó. Calculo que la inquietud nacerá por mi forma de ser. Fijate que en la casa empezaron las dudas antes de que pudiera acercarme a Marianela. Lo que pasa es que soy demasiado sensible para lo que es un hombre. Mi mamá siempre me dice: “Vos tendrías que haber nacido mujer”.
–OK. No sos homosexual. ¿Metrosexual, acaso?
–Sí, eso sí, porque me gusta arreglarme y cuidar los detalles de coquetería. Por ejemplo, si un día dormí poco, no voy a dudar en robarle los cosméticos a mi hermana y ponerme tapaojeras.
En la duda. Leandro Maldonado (22) aclara una y otra vez que es heterosexual. Pero –honestidad brutal mediante– reconoce que una vez dudó de su condición. Fue una noche en Amerika, un conocido boliche gay de la zona de Almagro. “Yo había ido a buscar chicas, porque ahí son bastante rápidas y sin vueltas. Y en medio de eso vi a un pibe tan fachero que le propuse ir a levantar minas juntos. Pero él era homosexual. Y me miró, lo miré, me miró, lo miré, hasta que me guiñó el ojo y pensé: ‘Tiene facha, es simpático… ¿estaría con él?’ Pero no… fue sólo pensamiento, no sentimiento. Es más, imaginarme el contacto físico con él me dio rechazo”.
–Pero en la casa tuviste mucho contacto físico con Sebastián…
–Sí, pero nunca llegué a los besos o las caricias.
–¿Le diste un beso a un hombre alguna vez?
–Sí, pero boludeando con mis hermanos o con amigos. Por ejemplo, cuando estás en un boliche y le pedís a dos chicas que se besen, pero ellas ponen como condición que antes nos besemos nosotros. Pero siempre fueron picos, nunca más que eso…
–¿Cuál fue tu reacción cuando lo viste por primera vez a Sebastián?
–Al toque me di cuenta de que era gay. Pero no porque tuviera forma amanerada, eh. Tengo como un tacto especial para darme cuenta de eso en cuanto los veo, porque tengo muchos amigos homosexuales (la mayoría del ámbito del teatro). Por eso me sentía cómodo con él, así como pensaba que podía hacerlo sentir cómodo a él conmigo.
–¿Por qué no te molestó que pensaran que sos homosexual?
–Porque yo sé muy bien lo que soy. A mí me causaba gracia que en la casa siempre hicieran hincapié en mi parte amanerada, y no en todo lo masculino, como mi forma de actuar, mis ganas de estar con las chicas, y hasta mi pasión por hablar de fútbol. Pero cuando Diego y Damián echaron a correr la bola de que para ellos era bisexual, no los quise juzgar, porque si yo había generado esa duda sin querer, estaba bien que pensaran así.
Pide perdón. Cuando Leandro dejó la casa que habitó durante 62 días, se encontró con una videoteca repleta de imágenes de su affaire con Sebastián. Allí se reflejaba lo mucho que sufrió su amigo por esa historia de amor que no fue. “Cuando vi todo eso, me di cuenta de que me había excedido inconscientemente. Y en un punto me arrepentí de no haber parado la mano después de que él me confesó que yo le gustaba. Pero creí que a él no le molestaba que jugáramos como lo habíamos hecho hasta ese momento”.
–¿Cuándo salga le vas a pedir disculpas?
–Sí, a Seba le puedo pedir perdón por lo que sea. Por lo que hice, por lo que no hice, y por haberlo lastimado.

–¿Y vos creés que él va a aceptar esas disculpas?
–Espero que sí…
–Un comentario común del público fue “a Leandro le faltan un par de jugadores”, como diciendo que estás un poco loco. ¿Es verdad?
–¡Ja ja ja! La gente que me conoce sabe cómo soy.
–¿Pero te falta algún jugador o no?
–No, pero que te falte alguno que otro nunca está mal, eh…

Si el reality show Gran Hermano 2007 fuera llevado a la pantalla grande por el productor y director George Lucas seguramente sería una saga que llevaría por titulo“La guerra de las galas”, y sus episodios bautizados como “La amenaza de Nadia”, “El ataque de los pollos”, “La venganza de los Halcones”, “Una nueva alianza”, “Los tumberos contraatacan” y “El retorno de Claudia”.

Así se desarrollaron los primeros dos meses en la casa más famosa del país donde ocurrió de todo: alianzas, estrategias, traiciones, falsedades y hasta auto nominaciones.

Al mejor estilo Hollywood, la “guerra” comenzó con una traición que Nadia Epstein realizó en forma estratégica para alejarse de un grupo que estaba siendo implacablemente “exterminado” y planteó el comienzo de una trama casi cinematográfica.

A partir de ese momento una nueva alianza surgía alzando la bandera de una sinceridad inexistente proclamando a “Los pollitos” como dueños y señores del juego pero la resistencia conformada, a esa altura por una sola participante, Marianela Mirra, sobrevivió a todos los intentos por ser extinguida.

Este hecho conllevó varias bajas impensadas y un cambio de bando inesperado ya que Mariela Montero decidió alejarse de quienes ostentaban el poder para conformar, junto a Marianela y a Leandro Maldonado, “Los halcones”, grupo que contaba ahora con la fuerza de la gente.

Desde las sombras “Los tumberos”, comandados por el ex convicto Diego Leonardi y su discípulo Gabriel Lagos, se movían de un lado a otro, sin tomar partido por ninguna de las dos tropas, repartiendo sus votos para desgastar a ambas coaliciones por igual.

Con la caída de Epstein, la cabeza principal de “Los pollitos”, sus escuderos Sebastián Pollastro, Jonathan Dieguez, Jessica “Osito” Gómez y Griselda Sánchez comenzaron un plan para “vengar” su salida, enfrentando a Mariela y Leandro, dos de sus eternos rivales que además empezaban a mantener una relación de pareja, buscando propinar un durísimo golpe en “sus enemigos”.

Tras la partida inevitable de Leandro, un “Halcón”, un giro inesperado trajo de vuelta a la primera concursante eliminada Claudia Ciardone, quien inmediatamente reforzó las líneas de Marianela y compañía, desatando en Griselda, antigua rival de la bella blonda, un ataque de envidia y celos dignos de un infante.

Aunque la batalla continúa, tanto “Los pollitos” como “Los Halcones” quieren demostrar que los conflictos ya no existen pero por las dudas “Los tumberos” refuerzan su plan de guerra con una nueva forma de comunicarse: el lenguaje carcelario, intentando compartir sus opiniones sin que el ojo que todo lo ve pueda interferir en los acontecimientos.

Ahora sobrevienen tiempos de tensa calma, claro que hoy una nueva nominación inclinará la balanza a favor de unos ya que el próximo jueves otra cabeza “rodará” y una vez más se iniciará la lucha por la supervivencia en el planeta GH.

De la pagina web Gran Hermano

Los romances y noviazgos nacieron en las distintas ediciones del juego. Algunos duraron y hasta llegaron al altar mientras que otros se esfumaron con el pasar de los días. Los casos más resonantes
El amor hizo estragos en Gran Hermano. Varios romances surgieron frente a las cámaras televisivas que filmaron todo: desde las declaraciones de amor hasta los jugueteos entre las sábanas.

Mariela también cosecho éxitos amorosos. Intercambió mimos con Jonathan y se besó apasionadamente con Leandro. La relación entre este último y la salteña quedó en un stand by y podría continuar en los próximos días.

UN REENCUENTRO ESPERADO

El publico bramaba como en un circo romano, y los leones estaban por devorarse al mundo después de pasar 119 días encerrados e incomunicados. Y con la salida de Mariela se produjo el esperado reencuentro con Leandro. Sobre todo esperado por Leandro. Porque luego de unos mimos y un pacto en la casa, en el afuera la parejita iba a encontrarse con nuevo tablero y nuevas reglas. Con un nuevo juego.. Y un beso a pedido de la hinchada fue el puntapié inicial ¿no Leandro?

"Estoy feliz de la vida. Lo del beso no se, salió..... Tenia ganas de darle uno cuando pensaba en como recibirla, pero no sabia como iba a venir ella.
Tenia muchísimo miedo y todavía lo sigo teniendo, pero se va a ir disipando de a poco, porque todo se esta dando tal como lo pactamos adentro de la casa. No somos nada, pero compartimos un montón de cosas y cumplimos la promesa de esperarnos. Ahora necesito tener una charla bien larga con ella. Estoy dispuesto a probar algo mas formal si es lo que ella necesita. Estoy dispuesto a lo que quiera, entregadísimo. Quiero estar con ella , no me importa como."